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Estrategias de inversión para no dejar nada al azar

En finanzas, las estrategias de inversión son reglas que en su conjunto modelan comportamientos y procedimientos diseñados para orientar a un inversor en la selección de una cartera de valores productiva. Sin embargo, no hay fórmulas mágicas que determinen qué tipo de mecanismo es el más efectivo y eficiente al momento de invertir.

No obstante, existen premisas que determinan cuál es la estrategia más acertada  y las mismas están diseñadas en el contexto de las desventajas riesgo-retorno de los inversores. Por ellos algunos de estos inversores  prefieren maximizar el retorno de su inversión esperado mediante los activos de riesgo. Sin embargo, otros más cautelosos prefieren reducir al mínimo el riesgo, pero al fin y al cabo la mayoría escoge una estrategia en algún punto intermedio.

Dichas activos de riesgo, se utilizan para reducir al mínimo los costes de todas las transacciones, y dichas estrategias en la medida de lo posible y dependiendo de  los tiempos de mercado son el mejor intento de maximizar los rendimientos.

¿Qué es exactamente una estrategia de inversión?

Ahora bien, sin importar el tipo de estrategia seleccionada es necesario no ir a ciegas al ruedo de la inversión, recordemos que las elecciones arbitrarias basadas en la suerte o soluciones mágicas. Es necesario contar con estrategias bien planificadas que echen por tierra cualquier suposición sin base de conocimientos. 

Invertir sin tener al menos una o varias estrategias de inversión es simplemente una locura. Quien no use estos mecanismos, se va dando tumbos y moviendo su dinero solo basándose en presentimientos o noticias, y algo así solo puede llevar a un solo lugar: al fracaso.

Pero ¿Qué es exactamente una estrategia de inversión? Una estrategia de inversión es el plan que conduce a todas las decisiones que un trader tiene que tomar cuando realiza una operación financiera. Para determinar las estrategias de inversión, hay que tener en cuenta estas dos variables fundamentales:

  • Plazo del trading: corto, medio o largo plazo.
  • Producto sobre el que se realizará el trading: Acciones, divisas, índices bursátiles, materias primas, CFDs.

Cuando ya se ha establecido el tiempo de la inversión y el producto o activo financiero donde se piensa colocar nuestro dinero, se pasa a considerar otros aspectos clave, que son propios de cada operador como son:

  • Perfil de riesgo.
  • Objetivo de rentabilidad.
  • Capital disponible para el trading

A partir de todos estos elementos la estrategia de inversión definirá las directrices para abrir y cerrar posiciones, así como la gestión del riesgo en cada operación.

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